Por Diego Gómez
En abril de 1941, luego de la invasión y conquista
nazi-fascista del reino de Yugoslavia,
el régimen liderado por Adolf Hitler otorgaba al movimiento ustasha[1] el
control de los territorios de Croacia y Bosnia-Herzegovina. Allí se creaba el Estado
Independiente de Croacia[2](NDH, del croata NezavisnaDržavaHrvatska),uno
de los Estados títeres pro-nazis de la Segunda Guerra Mundial, que se
distinguía por llevar adelante un nacionalismo de extrema derecha,sustentado en
una firme adhesión al cristianismo católico, un marcado anticomunismo y un
fuerte desprecio y persecución de la nacionalidad serbia que vivía en Croacia y
Bosnia.
En agosto de 1941, contemporáneo a la implementación
de la “Solución Final” a la cuestión judía, se creaba el campo de exterminio de
Jasenovac, que estaba dividido en cinco sub-campos, incluyendo entre los mismos
uno destinado a mujeres (Sisak) y otro a niños (StaraGradiska). Ubicado a 100 kilómetros de la capital Zagreb,
era un territorio en forma de triángulo rodeado por los ríos Sava, Una y
VelikaStruga, lo cual hacía extremadamente difícil que los prisioneros pudieran
escapar. Los campos de exterminio que funcionaron en el NHD se distinguieron
absolutamente de los que se encontraban en Alemania o en los territorios
dominados por los alemanes, pues lejos estuvieron de ser una maquinaria
industrial destinada a la aniquilación de personas. Cuando llegaban los presos,
los comandos encargados seleccionaban a aquellos más aptos para trabajar, y
quienes eran considerados inadecuados para convertirse en mano de obra esclava
eran conducidos a las orillas del río Sava,
donde eran exterminados. La crueldad de los asesinatos cometidos fue enorme,
los métodos eran salvajes en extremo; aparte de la utilización del srbosjec (en
serbo-croata, cuchillo mata serbios), se realizaban grandes hogueras donde los
prisioneros eran quemados vivos, también se los arrojaba en piletas de cal
viva, se les golpeaba en la cabeza con un enorme y pesado martillo hasta la
muerte o se los tiraba al río Sava
para que muriesen ahogados.
Las víctimas de Jasenovac fueron todos aquellos
grupos nacionales, políticos o religiosos considerados opuestos a los valores
del movimiento ustasha. El pueblo serbio que habitaba Croacia y Bosnia, los
judíos, gitanos y los luchadores antifascistas en general (croatas, serbios,
musulmanes, etc) eran caracterizados como enemigos acérrimos del régimen. Especial
énfasis se ponía en borrar cualquier tipo de pasado de la nacionalidad serbia
en la región.MileBudak, el ministro de educaciónustasha, sostenía que un tercio
de los serbios dentro de la NDH debían ser asesinados, un tercio tenía que ser
exiliado y el tercio restante convertido al cristianismo católico. Distintas
fuentes[3] y
estudios calculan que en Jasenovac murieron un número cercano a las 700.000
personas, siendo la nacionalidad serbia un 80% del total.
La brutalidad al extremo de Jasenovac dejaba
anonadados a los mismísimos informantes del ejército alemán. En un reporte
llegado desde Croacia, para Heinrich Himmler[4],
se detallaba lo siguiente:
“Los ustasha
han cometido sus actos de una manera bestial, no sólo contra los hombres, sino
especialmente contra ancianos, mujeres y niños indefensos. El número de
ortodoxos que los croatas han masacrado y torturado sádicamente hasta la muerte
es de aproximadamente trescientos mil”[5].
El 30 de marzo
de 1945,
los partisanos yugoslavos, liderados por el Partido Comunista de Yugoslavia
comenzaban a bombardear las instalaciones del campo, haciendo retroceder a las
fuerzas ustashas que lo protegían. Los ataques continuaban durante las primeras
tres semanas de abrilmientras que las autoridades aceleraban los asesinatos en
medio del fuego partisano. El 24, luego de casi un mes de asedio, las tropas
del Consejo Antifascista para la Liberación de Yugoslavia[6]
(AVNOJ Antifašističko Vijeće Narodnog Oslobođenja Jugoslavije) lograban
vencer la resistencia e ingresar, pero los ustachas
habían eliminado casi todo vestigio de sus atrocidades al incendiar la mayor
parte de las edificaciones que pudieran dar cuenta del tremendo genocidio que
allí había sucedido.
La iglesia católica croata había jugado un
importantísimo papel en cuanto sostén político e ideológico del régimen
ustasha. El cardenal de Zagreb durante la guerra, AloysiusStepinac, juzgado y
condenado por la Yugoslavia de Tito debido a su complicidad con los ustashas,
fue reivindicado por el Vaticano en muchas oportunidades y llegó a ser
beatificado por Juan Pablo II en 1998. Recién en septiembre del 2009 el
Arzobispo de Zagreb, JozipBozanic, reflexionó sobre el accionar de la iglesia
católica: “aquí en Jasenovac, sentimos un profundo dolor por todas las
víctimas, especialmente aquellas que aquí sufrieron y que fueron asesinadas por
miembros del pueblo croata, y aún más por miembros de la Iglesia católica”[7].
Finalizada la Segunda Guerra Mundial, el régimen
comunista yugoslavo construía un monumento y levantaba un museo en memoria de
las víctimas, pero durante las guerras de desintegración de Yugoslavia, a
principio de los años 90 del siglo pasado, las fuerzas nacionalistas croatas
bombardeaban el museo destruyendo los archivos históricos allí guardados.El nacionalismo
secesionista que acababa con Yugoslavia (croata, serbio, esloveno,
albano-kosovar o musulmán bosníaco), con el fin de legitimar sus aspiraciones,negaba
y atacaba todo pasado que implicara la convivencia pacífica del pueblo
trabajador balcánico. En definitiva, al intentar borrar el registro del horror
que el nacionalismo burgués croata había llevado adelante en Jasenovac, se
pretendía hacer a un lado que contemporáneo a la barbarie capitalista de la
Segunda Guerra Mundial había surgido en Yugoslavia un movimiento
político-militar (formado por obreros y campesinos y, dirigido por el Partido
Comunista Yugoslavo) que no solo había vencido al nazi-fascismo sino que había
derrotado a los colaboracionistas ustashas dando lugar a un Estado
caracterizado por la convivencia de las distintas naciones y nacionalidades
yugoslavas durante décadas.
[1]Movimiento
nacionalista croata de extrema derecha surgido a finales de la década de 1920.
[2]El Estado
Independiente de Croacia tuvo lugar entre los años 1941 y 1945. Fue derrotado
por los partisanos comunistas yugoslavos
[3]
Dependiendo de la fuente los números van desde medio millón hasta un millón de
personas asesinadas. El Museo de
Víctimas del Genocidio de Belgrado, cifra en torno a 700 000
las víctimas de Jasenovac
[4]Comandante
en jefe de las SS y ministro del Interior del gobierno nazi. Fue uno de los más
importantes gestionadores de las matanzas de judíos, eslavos, gitanos y
disidentes en general durante el Tercer Reich.
[5]Novak, Viktor (2011) “Magnum Crimen:
Half a Century of Clericalism in Croatia : Dedicated to the Known and
Unknown Victims of Clericalism”. Gambit,
Jagodina.
[6]Fue el
gobierno provisional que se dieron los partisanos. Su fecha creación, el 29 de
noviembre de 1943, era la principal fecha patria de la República Federativa
Socialista de Yugoslavia
[7]http://www.jutarnji.hr/bozanic-u-jasenovcu---prerano/288735/