De manera recurrente, nuestro espacio ha sido particularmente crítico con la arquitectura, las prácticas y las relaciones de dominación que reproduce la denominada “comunidad internacional” y, muy especialmente, sus organismos y tribunales dedicados, supuestamente, a consagrar la armonía, la legalidad y la vigencia del derecho entre las naciones. El rol de estos tribunales ha sido puesto en crisis en muchísimas oportunidades, sobre todo en lo que hace a la selectividad de sus persecuciones y las defensas que ha asumido y asume, reproduciendo las relaciones de fuerzas especialmente asimétricas que caracterizan al mundo durante la modernidad tardía. En este caso en particular, habremos de marcar su reticencia a ocuparse de una problemática particularmente sensible: el avance sostenido y sistemático de los "golpes suaves" en el mundo, y particularmente en América Latina, cuestión ésta sobre la que hemos escrito mucho, y en la cual se advierte la ausencia de total protagonismo de estos organismos globales. Uno de esos casos llama la atención de esta hoja, y no es fácil resumir en trazos breves la complejidad de la trama implicada y promediarla con el tiempo potencial a la que toda investigación inconclusa obliga. No obstante, vamos a tratar de dotar de cierta coherencia interna nuestro relato, para que se entienda la problemática que subyace tras el mismo y el increíble silencio que este tipo de episodios ha deparado a nivel internacional. 


Un militar de grado argentino, "nacionalista" y profundamente anticomunista él, llamado Rodolfo Barrios Saavedra, decide en la década de los noventa, en plena guerra balcánica, alistarse en el ejército croata. Barrios llega a ser brigadier de esa fuerza, adquiere la nacionalidad croata y actualmente vive en Zagreb o sus alrededores, juntamente con su familia. El episodio, llamativo por cierto, no parece ser original ni único. El libelo ultraderechista y promilitarista argentino Seprin da cuenta de que al menos 400 militares argentinos contribuyeron al desmembramiento forzado de un país que era inaceptable para la OTAN en medio de Europa, lo que estos personajes denominan “guerra de liberación” (http://seprin.info/2014/05/29/militares-argentinos-por-el-mundo-los-heroes-no-reconocidos/). No debemos olvidar que el gobierno de Menem contrabandeó 6500 toneladas de armas destinadas a favorecer a Croacia en el conflicto (época de "relaciones carnales", cabe recordar). Volviendo al mencionado Barrios, es necesario destacar que el mismo fue objeto de una larga entrevista donde el militar dió cuenta de su -por lo menos- polémica  posición ideológica y su curiosa postura respecto del conflicto de los Balcanes, elogios al general Ante Gotovina incluidos. Esa entrevista, vale tenerlo en cuenta, lo realizaron los conductores de un programa radial de la ciudad de Rosario, denominado “Bar Croata”. La nota se encuentra disponible en http://www.goear.com/listen/db57f0e/entrevista-en-programa-radial-bar-croata-rodolfo-barrio-saavedra-brigadier-del-ejacopyrcito-croata
 Estos mis mismos periodistas entrevistaron posteriormente a representantes de la comunidad croata de Santa Cruz de la Sierra, lugar emblemático en términos de conflictividad política en el país andino, muchas veces protagonizadas por grupos separatistas de extrema derecha que sistemáticamente intentaron desestabilizar al gobierno del presidente Morales. En ese reportaje radial, los entrevistados se manifiestan de manera categórica sobre aspectos cruciales que hacen a la realidad boliviana, avanzando incluso en una defensa del embajador Philippe Goldberg, que fuera expulsado de Bolivia por el gobierno de este país, justamente por ser protagonistas de actos separatistas y otras conductas por el estilo. Goldberg era embajador en los Balcanes en los momentos en los que se precipitó la fragmentación de la Antigua Yugoslavia. También, cuestionaron abiertamente la decisión del Presidente Morales y reivindicaron a Santa Cruz como la región "que alimenta a Bolivia", lo que permite inferir el cuño ideológico de los invitados.
No son los únicos que ensayan esas tesis.  Cuentan con el aval de referentes derechistas recalcitrantes de nota. Uno de ellos es Branco Marinkovic. El diario español Público, en su edición del 5 de enero de 2009, lo presentaba como un exponente "de las racistas élites cruceñas que temen perder sus privilegios". Y agregaba en la nota titulada "El croata que declaró la guerra a Evo Morales": "Terrateniente, banquero, industrial, político. Branco Marinkovic (1967, Santa Cruz de la Sierra, Bolivia), está presente en la vida de la región cruceña desde todos sus puntos cardinales. Su familia, de origen croata, recaló en el oriente boliviano después de la II Guerra Mundial. Hoy Branco es el rostro visible, blanco y exitoso, de la poderosa burguesía local. Reclama autonomía, pero se le acusa de secesionista, de querer balcanizar Bolivia desde su Departamento más rico. Es el croata en guerra con los indios. Es la némesis del presidente Evo Morales.
Pero, ¿quién es Marinkovic? Sus padres, Silvio y Radmila, huyeron de la Yugoslavia de Tito tras haber apoyado el régimen nazi en Croacia. "Escaparon hace 50 años. Cuando yo era chico, iba a Yugoslavia y allí veía los radicalismos del régimen comunista", recuerda Marinkovic. La mera idea del socialismo pregonado por Evo Morales se le atraganta. Admira a Estados Unidos, donde estudió ingeniería, y desprecia al presidente venezolano, Hugo Chávez" (http://www.publico.es/internacional/188260/el-croata-que-declaro-la-guerra-a-evo-morales)
Muchos lo sindican como financista de intentos separatistas impulsados por terroristas mercenarios, en una actividad conjunta que, para variar, enrolaba a carapintadas argentinos (.http://old.kaosenlared.net/noticia/fiscalia-boliviana-marinkovic-nayar-costas-cobijaron-grupo-rozsa). La misma conexión entre Marinkovic y Rosza Flores establece Ignacio Montes de Oca en su libro "Ustachas" (disponible en http://books.google.at/books?id=FZTeAAAAQBAJ&pg=PT241&lpg=PT241&dq=Marinkovic+y+rozsa+flores&source=bl&ots=BT5ngCaoHf&sig=LvqgJznrkTqdPiOJjIWi33qMxRc&hl=es-419&sa=X&ei=Z1oMVOSXHKOHjAKS74HACw&ved=0CDsQ6AEwBg#v=onepage&q=Marinkovic%20y%20rozsa%20flores&f=false), y lo propio detalla el medio ARGENPRESS. Esta hoja, cuyo director fundador es el periodista Emilio Corbière, profundiza definitivamente sobre la cuestión:"Mientras las autoridades norteamericanas someten a inspecciones “integrales” a los viajantes de catorce países incluyendo, sin justificación alguna, a Cuba, los terroristas vinculados a la extrema derecha de América Latina siguen buscando libremente refugio en territorio norteamericano.



El último representante de esta mafia de empresarios golpistas latinoamericanos es el ex líder opositor boliviano de la región oriental de Santa Cruz, Branko Marinkovic, que la justicia del país andino acaba de denunciar como principal financista y cómplice de la banda terrorista desarticulada en ese departamento en 2009.

El servicio boliviano de Migración ha confirmado a la Fiscalía que Marinkovic salió del país el 26 de junio de 2009 del aeropuerto internacional de Viru Viru Santa Cruz en un vuelo cuyo destino fue Miami, Estados Unidos.

El 16 de abril de 2009, un grupo de la Unidad Táctica de Resolución de Crisis de la Policía boliviana irrumpió en el hotel Las Américas de la mencionada localidad y sorprendió a un comando paramilitar reclutado y financiado por Marinkovic y unos otros conspiradores.

En la operación policíaca, perecieron los mercenarios europeos Eduardo Rózsa Flores (croata), Michael Dwyer (irlandés) y Árpád Magyarosi (rumano-húngaro). Los terroristas preparaban un atentado para asesinar el presidente boliviano, Evo Morales.

La Fiscalía boliviana acaba de anunciar que las evidencias reunidas en los últimos meses demuestran la responsabilidad de Marinkovic y de otros empresarios también vinculados con la trama terrorista.

Según la investigación, Marinkovic financió a la célula terrorista integrada por Rózsa Flores, Dwyer, Magyarosi así como Mario Tadic, detenido en la operación junto al húngaro Elod Tóasó. Se comprobó que Marinkovic entregó 200 mil dólares a los terroristas para la compra de armas.

Considerado uno de los mayores latifundistas de Bolivia. Branko Marinkovic, nació el 21 de agosto de 1967 en Santa Cruz de la Sierra. Este hijo de nazi utasha croata refugiado en Bolivia, estudió en la Universidad de Texas, EEUU.

Marinkovic también financió a los elementos secesionistas opuestos al gobierno del presidente Evo Morales que en septiembre de 2006 provocaron graves incidentes en Santa Cruz de la Sierra y otras ciudades del oriente de Bolivia.

De origen croata, Rosza Flores, el jefe del grupo de mercenarios financiado por Marinkovic, perteneció en Hungría donde residió a círculos ligados al partido neonazi Jobbik.

Por otro lado, llama la atención como una organización separatista liderada por Marinkovic, el grupo FULIDE, pertenece a la "Red Liberal de América Latina" (RELIAL), financiada y orientada por la fundación alemana Friedrich Naumann Stiftung (FNS).

FULIDE tiene la característica de exhibir svásticas, el conocido símbolo nazi, en sus manifestaciones. También se sabe que el grupo terrorista de Rosza Flores ha sido asesorado por Jorge Mones Ruiz, capo de UnoAmérica, fundación fascista asociada a la CIA.

Tales organizaciones de extrema derecha son parte de la telaraña que reúne varios grupos que se reaparecieron en los últimos meses al lado de los golpistas de Honduras dirigidos por el empresario Roberto Micheletti.

Entre otros apoyos del régimen de Tegucigalpa se encontraba el terrorista de origen cubano Armando Valladares, asociado a las actividades desestabilizadoras de Marinkovic. En Bolivia, donde viajó, Valladares actuó a través de la organización norteamericana Human Rights Foundation cuyo representante boliviano, Hugo Achá Melgar, también se refugió en Estados Unidos después de ser denunciado por complicidad con la pandilla de Rosza Flores.

En Venezuela, la FNS se suma al enorme coro de las organizaciones derechistas alineadas con el Departamento de Estado que promueven políticas neoliberales con presupuestos millonarios proveídos por la USAID y la National Endowment for Democracy" (http://www.argenpress.info/2010/02/denunciado-por-terrorismo-en-bolivia.html).

 Por su parte, el reconocido corresponsal de guerra Julio César Alonso, recientemente condecorado por el ejército español, por su labor profesional y humanitaria, revela quién era el fallecido Eduardo Rosza Flores. Según el periodista,“Eduardo Rozsa Flores tenía un grupo de mercenarios que se dedicaba a fabricar guerras , la misión de Eduardo Rozsa no era combatir las causas (sic), no era luchar por una causa, era fabricar una guerra, fabricar una guerra consiste en matar a seres humanos de un lado y otro, reventar niños, reventar mujeres y después lograr que la locura de la guerra envuelva a una sociedad y en menos de dos semanas se consigan 25 mil muertos”.Según la investigación de Alonso, Rozsa Flores participó en varios conflictos internacionales, entre ellos, sugestivamente, la guerra de Croacia. Las declaraciones de Julio César Alonso en "Radio Patria Nueva", Canal 7 de Bolivia(https://www.youtube.com/watch?v=9rN3VsPZRUI&list=PL18C2D0E14B6A08D9), resultan por demás interesantes y motivan la inexcusable problematización de este tipo de temas, hasta ahora ignorados por la gran prensa occidental.