Por Eduardo Luis Aguirre
Poner en tensión una categoría política que inaugura el pensamiento de la modernidad occidental desde una perspectiva liberadora implica algunos desafíos no habituales para las escuelas de derecho argentinas.
El histórico proceso que derivó en la reciente media sanción de una ley que promueve el aborto legal, seguro y gratuito en la Argentina volvió a dar cuenta de la relevancia y la densidad de miles y miles de mujeres ganando la escena pública. La militancia por el reconocimiento de derechos fundamentales de las mujeres encarna un nuevo sujeto político, original, inédito e imprevisible para las conceptuaciones sociológicas clásicas.
El sociólogo portugués Boaventura de Sousa Santos advierte, parafraseando a Carlos Marx, que un fantasma recorre América Latina. Ese fantasma es nada más y nada menos que la restauración conservadora en diversos países de la región, y esa irrupción -para muchos inesperada- obliga a Boa a tratar de entender cómo pudieron derrumbarse, como un castillo de naipes, las conquistas y derechos a los que, con sus más y sus menos, los pueblos del Continente habían accedido durante más de una década. Nos encontramos -postula- en un (nuevo) período de lucha defensivas.
Por Eduardo Luis Aguirre
Hace muy pocos días, el 31 de mayo pasado, fallecía el intelectual y académico peruano Aníbal Quijano.
Se trata de uno de los pensadores más importantes de América Latina, un militante por la causa de la liberación de los pueblos de la región, que pagó con la cárcel y la censura la creatividad de sus postulados teóricos y sus inclaudicables convicciones revolucionarias.
Ramón Grosfoguel, sociólogo portorriqueño, uno de los referentes más reconocidos de la Teoría de la Decolonialidad, es además uno de los militantes más conspicuos del denominado “Proyecto de la Modernidad/Colonialidad”, uno de los grupos de pensamiento crítico más importantes del Continente, integrado también por sus colegas Aníbal Quijano y Edgardo Lander, el semiólogo Walter Mignolo y los filósofos Enrique Dussel y Santiago Castro- Gómez, entre otros.
Por Eduardo Luis Aguirre
Con la irrupción de las nuevas derechas en América Latina, Boaventura de Sousa Santos inauguró la problematización de una cuestión de indudable centralidad que se abate sobre la región.
Por Daniel Feierstein (*)
Por Eduardo Luis Aguirre (*)
El mundo de la transmodernidad exhibe varias peculiaridades. Una de ellas es que nos enteramos en tiempo real de los acontecimientos que suceden en cualquier lugar del planeta. Esos hechos nos atraviesan, nos implican, nos comprometen.
En los últimos años -de cara a la adscripción electoral recurrente de vastos sectores sociales a las expresiones más radicalizadas de la derecha- han crecido los interrogantes y los ensayos de explicación respecto del comportamiento de ese colectivo social inasible al que denominamos convencionalmente “clase media”. La preocupación es absolutamente razonable, y radica en que, en muchos casos, ese sector social ha contribuido decisivamente a la imposición de proyectos políticos conservadores que, paradójicamente, perjudican sistemáticamente sus propias expectativas e intereses.
Por Eduardo Luis Aguirre
Alcira Argumedo, la intelectual que entre 1968 y 1974 formó parte de las «Cátedras Nacionales» de la Facultad de Filosofía y Letras de Buenos Aires, sintetizó en su obra “Los silencios y las voces en América Latina: notas sobre el pensamiento nacional y popular”, lo más saliente de una construcción teórica fuertemente atravesada por el nacionalismo popular y las teorías críticas latinoamericanas.